Nosotros no somos quiénes para meternos en los negocios de la gente. Pero de todas formas lo vamos a hacer porque tenemos la impunidad que nos da el anonimato y porque nos pagan para que escribamos este tipo de cosas.

Desde sus orígenes, el fútbol uruguayo es una crisis permanente. Una agonía que se extiende a través de los años. Un viejo entubado que casi no respira pero que nadie lo quiere desconectar por respeto o por culpa. Un animal extremadamente enfermo que sus dueños deberían sacrificar para evitar su sufrimiento y aun así no lo hacen. Un diente flojo que está a punto de caerse pero que por temor nadie se anima a agarrarlo con los dedos para terminar de sacarlo. ¿Más o menos se entendió?

En este contexto de crisis sostenida, sumado a la corrupción de algunos dirigentes de la AUF, la empresa Tenfield logró establecerse hace ya varios años como uno de los actores principales de nuestro fútbol. Un actor que tiene agarrado de los testículos a casi todos los equipos de Uruguay, o más bien a sus dirigentes, pero no queremos que se imaginen una mano agarrando los testículos de los dirigentes del fútbol uruguayo, que en su mayoría son ancianos y sus sacos escrotales deben estar sensiblemente alicaídos.

Es entonces que nos preguntamos por qué en esta grave crisis que está sufriendo nuestro fútbol, no aparece Tenfield con algunos pesos para repartir y se asegura muchos años más de turbios negocios adquiriendo los "derechos de televisación".

¿Será que a Paco Casal ya no le interesa hacer negocios? Sabemos que a él no le debe faltar nada. En todo caso lo único que le falta es un poco de sentido estético, pero eso no hay dinero que lo compre.

Nosotros en su lugar estaríamos cayendo a la AUF con camisa desabrochada, cadenitas de oro, zapatos lustrados, un pucho en la mano y tapaboca a hacer una oferta que los clubes, tan necesitados, no rechazarían.

Es solo una idea. Si leen esto y la llegan a hacer, no sean malos y acuérdense de tirarnos unos pesos. Nuestra opinión también tiene un precio y es muy negociable.

* No Seas Malo es un espacio humorístico que parodia el mundo del fútbol. Sus noticias no son reales (aunque muchas podrían serlo).