Segunda División postergó arranque para el 15 y 16 de setiembre a pedido de Rampla Juniors

La Segunda División Profesional postergó en una semana su inicio de la segunda rueda del Uruguayo, que estaba previsto para el 8 y 9 de setiembre, pero tras un pedido de Rampla Juniors y en Consejo de Liga, se trasladó para el 15 y 16 del mismo mes.

La situación se dio este viernes, luego que llegara una solicitud de Rampla Juniors ya que debe cancelar deudas con el fallecido ex entrenador del club, Julio César Toresani y el actual DT campeón del Apertura, Eduardo Espinel, que datan del año 2019, cuando el club descendió. 

En el caso del argentino nunca pudo cobrar su salario y acumuló varios meses de deuda, para luego ser cesado. El 22 de abril de aquél año, en una noticia que recorrió el mundo, el “Huevo” se suicidó y los que están reclamando el adeudo ante la Asociación Uruguaya de Fútbol son sus tres hijos.

Consultadas fuentes de los Picapiedras explicaron que: "con este plazo extra no habrá problemas para poder jugar. A principios de temporada, el club canceló deudas con otros ex entrenadores como Rosario Martínez y Luis 'Ronco' López, pero quedaron estos pendientes del 2019. Además el plantel está totalmente al día con sus salarios y se regularizó situación con BPS y DGI".

Pero Rampla, que hizo punta en el Consejo, tenía varios aliados en la votación, ya que otras dos también tenían adeudos para cancelar y al menos a tres más les servía el plazo extra por temas deportivos. Quedando de esta forma la solicitud con nueve clubes a favor y tres abstenciones.

La fecha 12, con la que se retomará el Uruguayo, tiene previstos los siguientes partidos: Rampla Juniors – Atenas, Danubio - Central Español y Uruguay Montevideo – Racing, todos para el miércoles 15. El jueves 16 se completará con: Juventud – Villa Teresa, Rocha – Defensor Sporting y Cerro – Albion.

Público

Una situación particular se vive en la divisional de ascenso, ya que como estaba previsto desde el arranque de la actividad, todos los partidos, salvo contadísimas excepciones, se juegan en el Estadio Charrúa, tal y como pasó la temporada pasada.

Pero la posibilidad de la apertura para un 40% del aforo de espectadores que permitiría la Secretaria Nacional del Deporte (como sucede en primera división), terminará obligando a los clubes a optar entre dos opciones: mantenerse en el Charrúa (no se puede recibir hinchas al no tener alambrado perimetral) pero salvar los costos organizativos, o jugar en sus canchas, recibiendo público, pero debiendo solventar los gastos.

Para ello, el viernes en el Concejo de Liga se decidió votar un cuarto intermedio hasta el miércoles 8, donde las instituciones volverán a estudiar el tema y tomarán una decisión final.