Gerardo Alcoba y su retiro del fútbol profesional: “Llegó el momento de disfrutar la vida”

Gerardo Alcoba anunció este martes que el del 9 de marzo ante Bolívar será el último partido de su carrera profesional. Cerrará su carrera disputando una Copa Libertadores en el Parque Viera y vistiendo la camiseta de Wanderers, el club que lo vio nacer. “Lo vengo procesando hace muchos meses. Capaz que un año o dos. Sabía que iba a llegar, pero había que ver cuándo”, relató al programa ‘Quiero Fútbol’ de Sport 890.

“Tenía ofertas para seguir en la primera división de Argentina, pero cuando surgió la posibilidad de venir a Wanderers pensé: ‘Voy, todavía estoy bien, me siento bárbaro y quiero volver a disfrutar de estar ahí’. En la parte individual y de devolverle al club un poco de lo que me dio. Estar unos meses y quedar más o menos a mano, o tranquilo retirándome en un club que merece que me retire así”, relató.

“Llegué con muchas ganas y con mis compañeros logramos algunos objetivos a corto plazo que me había propuesto; que el equipo saliera del equipo de descenso, clasificar a la Libertadores, jugar una final del Intermedio y que los gurises jóvenes se revalorizaran. A medida que íbamos logrando eso, mis ganas iban disminuyendo y se iba apagando ese fuego interior que uno tiene para cumplir con su profesión”, reconoció.

“Nunca termino de instalarme. Llegó el momento de disfrutar”

“Tengo mi casa en Maldonado y cada vez que tenía que volver a Montevideo me costaba un huevo. Pensaba: ‘Esta semana lo digo’. Así se fue estirando y estirando, hasta que un día me senté a hablarlo con mi familia en Maldonado, vine acá y se lo comuniqué al club”, narró Alcoba, quien no jugó contra River Plate el pasado sábado por una contractura en el gemelo.

“En 17 años siempre soñé, por una cuestión de dignidad, con terminar mi carrera de pie, no en un banco de suplentes, lesionado o sin equipo. Siempre quise retirarme bien, en buen estado. Me parece justo terminar jugando la Libertadores. Para mí es el momento, aunque mis compañeros me pidan que siga porque estoy impecable físicamente. Lo estoy, pero estoy muy cansado mentalmente. Ya no tengo ese fuego interior. Por ahí lo digo y puede resultar inentendible, pero ya está. Llegó el momento de disfrutar la vida”, afirmó.

“Lo que más me cansó fue la lejanía con mi familia. Mi señora es argentina y mi familia política está en Argentina. Me vine a Uruguay y mis viejos están en Maldonado, pero nunca termino de estar en mi casa. Tengo casa en Argentina y en Uruguay pero siempre estoy de vacaciones. No sé ni dónde tengo la ropa. Nunca termino de instalarme, y sumado a estas pocas ganas, todo se agravaba”, reconoció.

La anécdota de Gorosito que fue “una señal de que la carrera se estaba terminando”

“Disfrutaba más los entrenamientos que los partidos. A veces me pasaba, jugando acá, como que me iba de los partidos. Le preguntaba al árbitro cuánto faltaba, como deseando que terminara. O pensaba: ‘Qué frío que hace’. Siempre buscándole algo negativo. Ya no disfrutaba tanto. Me estaba costando mucho la competencia, aunque entrara a la cancha y me ponía en el personaje de futbolista”, relató.

“Veo que hay pelotas a las que ya no llego como antes. Ya no tengo ese fuego interior y perdí algo que es muy característico en mí; esa fuerza y el hecho de transmitir a mis compañeros y estar todo el tiempo casi como relatando los partidos. Cuando no hablo dentro de una cancha es porque algo me está pasando”, sostuvo Alcoba, quien recordó una anécdota con Néstor Gorosito que lo empujó hacia el retiro hace ya un año y medio, cuando todavía jugaba en Tigre.

“Tomábamos café antes de ir a entrenar y tenía una muy buena relación con Pipo Gorosito, que era nuestro técnico. Buscaba aliados para el retiro y empezaba a preguntarle a los más grandes como buscando que te den el consentimiento. Le pregunté cuándo fue el día que decidió retirarse, y me dijo: ‘Un día estaba jugando en Chile, hacía un frío terrible, perdíamos 1-0 y faltaban cinco minutos. Le pregunté al árbitro cuánto faltaba y me dijo que faltaban cinco minutos. Le dije que lo terminara, que no había nada para hacer. Al otro día fui a mi casa y le dije a mi familia que me retiraba’. Y yo por dentro pensaba: ‘A mí esto me pasa hace un año’. Me asusté y le conté a mi señora. Por todos lados me llegaban señales de que esto se estaba terminando”, sostuvo.

Juega la ida con Bolívar pero no la vuelta “por el tema de la burbuja”

Reconoció que se hubiera retirado tras la final del Torneo Intermedio si Wanderers la ganaba, recordó que Santiago ‘Morro’ García lo “enloquecía” cada vez que se enfrentaban por “lo insoportable y difícil que era marcarlo”, y que Juan Román Riquelme fue “el jugador más determinante” al que enfrentó porque “era imposible sacarle la pelota. Y también explicó que jugará el partido de ida ante Bolívar y no la revancha para evitar el confinamiento obligatorio con el que debería cumplir si viaja a La Paz.

“Lo anuncié ahora porque se terminan contratos de algunos compañeros y me parecía justo anunciarlo antes y que el club supiera que quedaba un lugar. Capaz que algún compañero podía tener una oportunidad más. Y está el tema de la burbuja; con estas pocas ganas que tengo, si me meto en una burbuja me mato adentro del hotel. Voy a hacer el aislamiento en Maldonado por haber tenido contacto con extranjeros, pero tranquilo en mi casa”, comentó el defensor fernandino de 36 años.

“Además le dije a Daniel (Carreño) que ya no me daba más. Los gurises del club me reviven en cada entrenamiento con una broma, una patada o un beso, pero siempre eran más los momentos en que pensaba ‘uh, tengo que ir a entrenar’ o ‘uh, tengo que ir a jugar’. Un poco quisieron convencerme, pero me notaron convencido y no me insistieron. Respetaron la decisión. Me dijeron que era una lástima que me retirara así, pero que son pocos los que pueden retirarse de esa forma”, concluyó.