El partido despedida de Diego Forlán será el 28 de diciembre en el Estadio Centenario

En las instalaciones del Antel Arena se realizó el lanzamiento del partido del partido despedida de Diego Forlán que se realizará el próximo 28 de diciembre en el Estadio Centenario.

Forlán durante la conferencia destacó que será un partido de fútbol entre el equipo conformado por los integrantes de la selección uruguaya que fue cuarta del Mundial de Sudáfrica 2010 y los ganadores de la Copa América 2011, ante un conjunto de amigos de "Cachavacha".

El ex delantero sentenció que entre los jugadores confirmados estarán Luis Suárez y Diego Lugano, mientras que cursó invitaciones a nombres como los de "los franceses Laurent Blanc, Robert Pires, los ingleses Neville, los españoles Santiago Cazorla y Fernando Hierro y varios más", pero aclaró: "todos a confirmar más cerca de la fecha".

"La mayoría de los compañeros van a estar", dijo sobre los celestes y mencionó que el cuerpo técnico de la selección, con Tabárez a la cabeza, estaría a cargo de ese conjunto.

"Será lindo compartir con los compañeros de esa época ya que no tuvimos la oportunidad de volver a juntarnos y divertirnos en una cancha de fútbol", mencionó.

Además expresó que la idea es que Cesar Luis Menotti sea el entrenador del equipo de sus amigos: "será un formato de partido de fútbol, pero quiero que sea un espectáculo para toda la familia".

Su carrera

En la conferencia fue consultado sobre cual considera cual fue su mejor momento de la carrera y no dudó en señalar el período del 2009 al 2011: "esa época de la selección y Atlético de Madrid me agarró en una plenitud física, maduro, con mucha confianza. Allí demostré y potencié mi carrera".

También fue consultado sobre los amigos que le quedaron e hizo hincapié en el "Ruso" Pérez: "tenemos una amistad muy linda, que data del 1994, mantenemos una relación espectacular. Sebastián Eguren, el ‘Loco Abreu', Juan Castillo, Andrés Scotti, todos compañeros que me quedaran de por vida".

Por último hizo referencia a lo que le quedó en el debe y expresó: "me quedó la amargura de no llegar a la final del Mundial en el 2010. Sigo insistiendo que estar tan cerca no se da todos los días, a un partido. No es tan fácil y haber estado tan, tan cerca, dejo una espinita".