Apertura: Progreso le ganó a Wanderers 3-0 de local con dos goles de Alles y uno de Jara

Progreso le ganó a Wanderers 3-0 en el Paladino por la fecha 13 del Torneo Apertura y cortó una racha de cinco encuentros sin ganar, en los que había logrado apenas un punto. Del otro lado, el equipo del Prado sufrió su cuarta derrota al hilo y no ha vuelto a sumar después 31 de agosto, cuando se impuso a Peñarol 2-0 en el Campeón del Siglo.

El primer tiempo fue muy malo y se jugó lejos de las áreas. El local con su habitual 4-1-4-1 de los últimos cotejos, y los bohemios con un marcado 4-2-3-1 en el que por momentos le faltó acompañamiento a Rodrigo Pastorini arriba. Con más lucha que juego, los primeros 45 minutos se terminaron sin jugadas de peligro cerca de los arcos.

Recién en el arranque de la etapa complementaria mostró algo el equipo de Leonel Rocco con dos acciones similares. Facundo Peraza complicó a velocidad por la derecha y a los 47’ Nahuel Roldán conectó un cabezazo que tapó Ignacio de Arruabarrena, y dos minutos después anotó Rodrigo Mieres. No obstante, las dos situaciones fueron invalidadas por offside.

Wanderers estuvo cerca con un mano a mano de Mathias Acuña que resolvió bien Nicola Pérez a los 56’. Ocho minutos después el arquero volvió a lucirse ante una llegada de Bruno Veglio por derecha tras un pase de Ignacio Lores. A esa altura los dos ya habían hecho mucho más en un rato de segundo tiempo que en toda la primera mitad.

Hasta que a los 70’ se abrió el score y empezó el descalabro bohemio. Una mano de Veglio en el área visitante le permitió a Gustavo Alles poner el 1-0 de penal, cuando los gauchos no lo merecían. No obstante, luego acumularon méritos, aprovecharon la debacle de su rival y transformaron triunfo en goleada.

Esteban González picó a fondo por derecha y mandó un centro bajo hacia atrás que Gonzalo Jara mandó a la red con un derechazo de primera a los 77’. Por si fuera poco, Alles concretó su doblete a los 80’ poniéndole el pecho a un centro de Riquero. La pelota dio en el travesaño y luego volvió a rebotar en el torso del ariete gaucho.

La diferencia resultó exagerada para lo que fue el trámite y terminó siendo un castigo para Wanderers, que desbarrancó en unos últimos 20 minutos que fueron el fiel reflejo de su campaña en el tramo final del Apertura.