Contenido creado por José Luis Calvete
Fútbol uruguayo
Empieza otro capítulo

Alexander Medina habló de su retiro

“Las ganas de ser entrenador superaron las ganas de levantarme a entrenar”, contó Alexander Medina, quien se mostró “feliz” tras su decisión de retirarse del fútbol. El Cacique narró lo difícil que fue sobrellevar una enfermedad que lo afectó en su primer semestre en Fénix.

05.08.2015 10:20

Lectura: 5'

2015-08-05T10:20:00-03:00
Compartir en

Montevideo Portal

Alexander Medina se retiró del fútbol a pocos días de cumplir 37 años. Decidido a comenzar una nueva carrera como entrenador, dijo estar “contento con la decisión”, más allá de admitir que “no fue fácil”. “Fueron muchos años jugando al fútbol. A los 5 se me encendió el fuego sagrado y ahora se apagaron esas ganas de entrenar y seguir jugando”, contó al programa 100% Deporte, de Sport 890.

“Fue un conjunto de cosas que llevaron a tomar esta decisión, pero estoy contento, tranquilo, en paz y analizando lo que pasó y lo que vendrá. Es un paso muy importante en mi vida, si no el más importante. Siempre proyecté y soñé con hacer esto que tanto me gusta. No sólo jugué porque era un modo de ganarme la vida, sino porque le metí mucha pasión y estoy feliz de haber transitado este camino”, dijo el salteño.

“La decisión del retiro pasó por mí y por nadie más. Todo el entorno familiar y de amigos te lleva a que sigas jugando, pero es una decisión personal que fue analizada. Fue un proceso de varios meses. No es que me desperté la semana pasada y dije ‘no juego más’. Creo que es el momento. Ya mi último tiempo en el fútbol había sido bastante complicado en varios aspectos y este era el momento ideal”, explicó el Cacique.

“Hay otras ganas que te van dando con el tiempo y tengo mucha pasión por ser entrenador, y no se despertó hace dos días: ya con 32 o 33 años empecé a ver el fútbol de otra manera y a preocuparme por otros aspectos, y más desde que hice el curso. Esas ganas superan las ganas de levantarme a ir a entrenar. De hecho, desde el último día que entrené con Fénix no hice más nada”, reconoció el ahora ex delantero.

El año pasado sufrió vértigo periférico, “un virus que se aloja en el oído medio y que regula el equilibrio”. “Si bien no se corre peligro de vida, es difícil de sobrellevar. Te cuesta enfocar las cosas y cuando girás te parece que vas a caer. No es un problema de rápida solución, sino que lleva un proceso de recuperación y a mí me llevó como seis meses y medio. Fue un golpe al mentón bastante importante”, recordó.

“Iba a dejar de jugar en diciembre, pero el apoyo de mi mujer, mis hijos y el resto de mi familia me hicieron rever esa decisión y entender que luego de haber superado muchas cosas en mi carrera no me iba a ganar un virus. No me podía ir así del fútbol. Quería ser entrenador y estaba buscando alguna excusa para poder tomar esa decisión, pero mi entorno me hizo entender que no era el momento para hacerlo”, admitió Medina.

“Un día estaba con mi hijo haciendo un trabajo de pelota en la recuperación y no veía la pelota. En un momento le dije: ‘juntá tus cosas que nos vamos. No juego más’. Y él me dijo lo que me marcó más: ‘¿Te va a ganar un virus?’. Tiene 13 años y conoce mi forma de pensar y de actuar. ‘Sí, tenés razón. No me va a ganar. Hoy nos vamos y mañana volvemos’, le dije, y así fue. Fue un tiempo muy duro pero pudimos terminar en pie, que era lo más importante, y el virus quedó atrás. Ya es parte del pasado”, dijo.

Ya recuperado pudo hacer lo que pretendía, que era irse de Fénix con una buena imagen. En el Clausura no estuvo a la orden en el primer partido y luego marcó presencia en 13 de los 14 restantes, habiendo sido titular cuatro veces y convirtiendo un gol en el triunfo por 3-0 sobre El Tanque Sisley el 22 de marzo. A esa altura ya pensaba más como director técnico que como futbolista, y así lo demuestra cuando habla.

“El retiro hay que planificarlo. Hay jugadores que lo demoran porque no saben qué hacer al otro día. Yo no precisé ayuda psicológica porque fui procesando durante este tiempo y proyectando lo que voy a hacer. Me dará nostalgia cuando vea mi primer partido desde la tribuna, pero no tengo ganas de entrenar”, dijo, aunque reconoció que volverá a la actividad física después de “tomarse un tiempo”.

“Retirarme en Nacional fue una de las metas que no pude conseguir, pero hacerlo en Fénix tampoco me cambiaba mucho. Quería hacerlo en Nacional y por eso había proyectado un nuevo contrato, pero las condiciones no se dieron”, lamentó, aunque esa situación no llega a empañar en lo más mínimo su sentimiento tricolor. De hecho, está emparentado con los momentos que “quedaron marcados a fuego” en su carrera: “la primera vez que fui campeón con Nacional y el clásico que ganamos 2-1 de atrás con dos tantos míos” están a la altura de un gol que le hizo al Real Madrid en el Bernabéu y a su debut con la selección uruguaya.

Hoy, siendo entrenador recibido, ya piensa en cómo serán sus primeros pasos del otro lado de la línea de cal, pero prefiere no apurarse. “Estoy haciendo un curso online de juego. Quiero tomarme un tiempo para armar el cuerpo técnico, viajar a otros países a ver entrenamientos, juntarme con entrenadores del medio local y utilizar este tiempo para prepararme y no ser un improvisado. Después esperaré la oportunidad”, concluyó Medina.

Montevideo Portal