Fiscalía española pedirá dos años de prisión para Stuani, Munúa, Diogo y varios latinos más

La investigación que llevó a cabo la Fiscalía Anticorrupción de España por el supuesto arreglo del partido que Zaragoza le ganó a Levante en mayo de 2011 para asegurar su permanencia en Primera División se archivó el 31 de julio de 2017 y se reabrió en el último mes por decisión de la jueza Isabel Rodríguez, del Juzgado número 8 de Valencia.

El Zaragoza venció al Levante 2-1 y decretó el descenso de Deportivo La Coruña. El entonces capitán del Zaragoza, Gabi Fernández (hoy capitán del Atlético de Madrid), declaró tres años después que aquel partido había sido amañado y que él simplemente recibió órdenes de su club. Aquel fue su último cotejo defendiendo esa camiseta. Javier Tebas, presidente de la Liga de Fútbol Profesional, fue quien presentó la denuncia a la Justicia.

Entre jugadores, entrenadores y dirigentes hubo un total de 41 investigados, de los cuales 36 siguen vinculados al caso. Zaragoza habría depositado un dinero cercano a los 965.000 euros en la cuenta de 10 de sus jugadores como premio por la salvación, para que fuera entregado en efectivo a los jugadores del Levante. Además, hubo un inusual retiro de 400.000 euros en efectivo de la caja del Zaragoza del entonces presidente del club, Agapito Iglesias.

En julio de 2017 se archivó el caso por entender que no había evidencias para determinar que el dinero llegó a manos de los futbolistas del Levante, equipo en el que por entonces militaban Gustavo Munúa y Cristhian Stuani. Los dos tuvieron que viajar en más de una ocasión para prestar declaración, al igual que Carlos Diogo, que defendía al Zaragoza y ya cerró su carrera profesional.

Parte de la investigación hizo público que los jugadores del Levante prácticamente no movieron sus cuentas corrientes en los meses posteriores al partido investigado, bajando considerablemente los gastos de cada uno. Eso fue lo que llevó a la jueza Rodríguez a reabrir la causa, y según medios españoles la fiscalía solicitará dos años de prisión para 36 de los implicados y seis años de suspensión en cualquier actividad vinculada al fútbol.

Entre los nombres aparecen, además de los uruguayos Diogo, Munúa y Stuani, importantes figuras internacionales como Ander Herrera (hoy en el Manchester United), los argentinos Nicolás Bertolo y Leonardo Ponzio, el paraguayo Paulo da Silva, los ecuatorianos Jefferson Montero y Felipe Caicedo, el español Vicente Iborra y el entrenador mexicano Javier Aguirre, que afronta otra investigación por el amaño de un partido en mayo de 2014.

Sea cual sea el fallo, es muy difícil que se efectivice la pena de prisión en la mayoría de los casos. Los que tienen más complicada su situación son el ex director deportivo Antonio Prieto, el ex presidente Agapito Iglesias y los directivos Javier Porquera y Fernando Checa, a quienes además se acusa de corrupción y de haber falsificado documentos para ocultar la maniobra.