Apertura: Fénix y Peñarol empataron 2-2 en Jardines del Hipódromo

Peñarol arrancó con todo y mereció algo más en la primera media hora de juego. El Carbonero le puso el ritmo al partido, generó chances y no dejó pasar a Fénix la media cancha.

De entrada nomás Nández ganó de cabeza tras un centro cruzado y exigió una notable tapada de Darío Denis abajo.

Poco después fue Junior Arias el que cabeceó en el área y nuevamente el arquero albivioleta intervino en gran forma.

Era claro el dominio mirasol, que no pudo en ese lapso superar la sacrificada tarea defensiva de Fénix, respaldada por el gran Denis.

De a poco el local supo soltarse y empezó a dividir la pelota en el medio campo y a obtener tiros de esquina. Tras la salida de uno de esos corners, un quedo de la defensa permitió a los 32' al Lolo Estoyanoff ubicar solo en la pasada a Gabrielli, que anotó el tanto de apertura.

Peñarol intentó volver a su hegemonía inicial pero ya Fénix estaba mejor parado. Quedó del primer tiempo el reclamo aurinegro en una jugada donde dio toda la sensación de que Pallas bajó a Cavallini y ameritaba sancionar penal.

La segunda parte arrancó ideal para Fénix. Fabián Estoyanoff marcó a los tres minutos el 2-0 dejando a un Peñarol nervioso y que evidenció problemas defensivos.

Gizzi, Acuña y el Lolo complicaban cada vez que llegaba la pelota arriba y por el contrario los de Leo Ramos casi no pisaban el área de Fénix.

Pero el equipo capurrense se fue tirando atrás, Ferrín hizo cambios defensivos y el manya creció con los ingresos de Rossi y Affonso más el adelantamiento de Nández.

Cavallini y Arias avisaron cerca de la media hora hasta que Cebolla Rodríguez xon un remate de afuera puso el descuento a los 32'.

Siguió con viento en la camiseta el aurinegro, dominando por completo y exigiendo a Denis, que otra vez tapó notable ante llegada clara de Cachila Arias.

Pero restando tres minutos Nahitan Nández de media vuelta pone el 2-2 después que Affonso peleara una pelota en el área. Peñarol rescató un punto en el final, virtud a no bajar los brazos pero ayudado por la postura del DT rival.